21 noviembre 2011

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Maneige - Les Porches (1975)


Álbum esencialmente deleitable desde comienzo a final.
De instrumentos delicados, melodías complejas armoniosamente mezclados con un arte muy singular entre  sonidos autóctonos (folclor quebécois) y los arreglos sinfónicos, jazz y, claro, los tintes progresivos impresos ahí.
La primer suite a la que nos adentramos titulada "Les Porches De Notre-Dame" de 19 minutos y algo más, es una belleza musical que nos quita de cualquier esfera de la realidad en la que nos encontremos aferrados. Nos introduce al ambiente con flautas y clarinetes luego, más viento, piano (clásico, progresivo y hasta religioso si se quiere), secciones de cuerdas, trompetas, finales alucinantes y retornos a melodías, saxo, solo de guitarra (y qué solo)... éxtasis.
Le sigue el comienzo pacifista de "Le Grosse Torche", es como una antesala que conecta la magia anterior con la que viene, preparándonos. Exquisita, con flautas, piano, cuerdas.
Toma el mando "Les Aventures De Saxinette Et Clarophone", y es una fiesta de instrumentos que indescriptible por lo que genera, son 15 minutos de disfrute y ensimismamiento que nos tiene al vilo de la incógnita al preguntarnos hasta donde nos puede llevar, con tanta calidad e innovación rítmica. El saxo y el clarinete desde la segunda mitad, se ponen bajo del  reflector para asir desde ahí nuestras cabezas.
Cierra con "Chromo", y es donde ya la línea alucinante sobre la que veníamos caminando se torna sinuosa y nos da varias vueltas rítmicas más, mostrándonos más pasajes, más de fusiones, mas magia.

20 noviembre 2011

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Stafrænn Hákon - Gummi (2007)


Post Rock y desde Islandia, quizás eso, hasta diga mucho.
Gummi es el quinto álbum de estudio de éste banda liderada por Ólafur Josephsson que, con solo probar unas bocanadas de su música, deja mucho de qué hablar. Deja muchas sensaciones. Es una  ambiente tan elaborado el que produce, con elementos electrónicos, con las combinaciones justas y necesarias de guitarra, noise, y la voz ahí, bien lograda, entrelazada, pareciera con los sonidos que llegan a alcanzar un despliegue armónico tan fluido, que de momentos, pudiésemos bien compararlos y asemejarlos, por qué no, con sus compatriotas Sigur Rós. Aunque esto sólo a modo de ubicárnoslo en un panorama musical, del que al escucharlo, bien podría fundirse y perderse de cualquier clasificación que pretendiésemos.
Es un disco con mucha vida propia, con muchos despertares de emociones. Magia simple e intensa, he ahí la conjunción y la armonía; hipnótica y relajante, completa. Y sin más que decir, sólo queda descubrir qué colores de paisajes faltara por pintar y probar si es que es que con Gimmi, bien pudiera conseguírselo. Yo creo que si.

19 noviembre 2011

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Colour Haze - Tempel (2006)


Stoner rock de los más característicos si los hay. Lo que no quita, ni nos priva de los lugares propios desde los cuales Colour Haze nos los muestra; lleno de ambientes cargados de  transes psicodélicos, densos, volados y hasta lisérgicos.
En Tempel, los riffs con mucha potencia e intensidad, tienen un protagonismo importante, distorsiones viajeras y espaciales, con pasajes -que tan bien los combinan- fluidos y relajados en escalas bajas. ¿Qué más? melodías eclécticas y en espiral que logra  Koglek, en conjunción con los demás miembros.
Las canciones  pueden definirse como estimulantes y eufóricas, relajantes y apaciguables, toman el  ritmo y transportan  en un desierto lleno de colores, en un viaje hasta casi de perdición y desesperación, inquietante.
Es un disco que, aunque con decirlo Stoner ya  lo definimos, sin dudas llega a crear sensaciones únicas a cualquiera que lo escuche, y con esto logra su objetivo, y se torna un ejemplar disfrutable, en el que vale la pena el  perderse por un buen rato.

11 noviembre 2011

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maudlin of the Well - Bath (2001)


Disco un tanto difícil de catalogar, hay barreras de complejas fusiones que se ponen en el medio y que pudiera causar quizás que se nos muestre difícil de digerir por tanta mixtura de géneros; que luego de sobrepasarla, entendemos lo indispensable de esa mixtura para llevar a cabo una obra así de compleja, prolija, de contrastes varios, a lo largo del disco, que invitan  entre otras cosas, a expandir la percepción por sobre lo cotidiano.
Es un disco al que hay que darle la oportunidad de despliegue y de disfrute, dejándose sorprender por los cambios de ritmos y variaciones insospechadas de instrumentos y en las estructuras mismas de las canciones, lo que genera un vértigo increíble. Como se basa en el metal, no altera la idea de encontrar momentos densos y guturales, oscuros (pero no excesivo) e innovador, ya que a la par, se advierten pasajes más experimentales, la presencia de instrumentos de vientos que encuentran su lugar en algunos que otros momentos, encontrando la obligada armonía con los componentes claros del Death Metal y del Doom, sonando por momentos realmente tétricos como en los momentos en que, los teclados abandonan la psicodelia progresiva (como en el primer track), y se adentran en melodías inquietantes que realmente lleva a lugares insospechados.
Con escuchar Bath, estamos expuestos a una atmósfera de matices muy variados: texturas del post-rock, tintes progresivos, psicodelia experimental, y algo de metal extremo de a ratos, vanguardia y eclecticismo, si mas no faltaba, y si aún pensábamos que tantas combinaciones no son del todo buenas, no queda otra que probar con Bath.

10 noviembre 2011

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De Facto - Legende du Scorpion a Quatre Queues (2001)



Empezar  diciendo que lo que tenemos aquí es algo así como dub reggae psicodelico con pasajes pintados con  toques de salsa y latin jazz, nos pareciera augurar un disco interesantísimo de escuchar. Agregado como un plus  de gran peso, el hecho de los intérpretes de quienes deviene esta pieza experimental, ya casi no queda dudas.
Y si de experimental hablábamos, lo encontramos a Omar Rodríguez-López en el bajo, haciendo de las suyas, y a su compañero de por aquel entonces At Drive In, Cedric Bixler-Zabala en la batería, sumados a ellos los sonidos fundados por teclados y manipulación de característicos y delirantes trances psicodélicos a cargo de Ikey y Ward.
Este es el tercer y último disco de la banda, que contó en ocasiones con la participación de Frusciante, si más no faltaba.
Sin mucho más que abalar, queda decir que Legende du Scorpion es todo eso que promete y llega a saciar toda ansia de sonidos varios y fusiones inesperadas que se pretenda encontrar.

09 noviembre 2011

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Jethro Tull - Aqualung (1971)


Cuarto disco de estudio de ésta banda clásica, si las hay, que poca descripción necesita por estar ubicado en el lugar inamovible en el que se encuentra.
De la misma manera, prescindiendo de algún tipo de análisis minucioso, refiriéndonos ahora sí, a esta obra maestra llamada Aqualung, se lo puede ubicar con facilidad  en la cajita de “clásicos del rock (progresivo)”, que señaló consagración definitiva, y asentó bases un tanto mas sólidas en cuanto estilos y personalidad de la banda.
Dentro de las particularidades propias de la banda, las del disco quedan musicalmente 'adornadas' de secuencias instrumentales que expresarían tanto o  más de lo que se pretendió al gestarlas; y es con todo ello que no se pierde de vista sus tintes de rock progresista que lo mantienen ineluctables a lo largo de todo el disco, jugando en alguna que otra canción con ciertos aires medieval si se quiere, folk escoces y, como si fuera poco, flautas mezcladas, guitarras acústicas, rock duro (pero sin salirse de las líneas previamente trazadas).
Inconfundible y tan particular, aparece en escena y al frente de la misma, la cercanía en la voz del teatral  Anderson cantándonos, riendo, poniendo al frente críticas hacia la iglesia, modos sociales de vida… abriendo mentes; en otras desplegando toda la magia contenida, locura y psicodelia en la flauta travesera (en temas como en My God -aunque exceda lo acotado del análisis que se pretenda- despliega todo un paisaje musical, que solo nos pudiera remitir a su virtuosidad ejecutiva instrumental, transferencial, si no es que esta demás.)
Son el conjunto resonante en interacción de ingredientes como los mencionados, lo que le da a este disco pintoresco y sin desperdicios, el peso y la talla que porta desde la fecha de lanzamiento, y que lo hacen infaltable en toda colección.

05 noviembre 2011

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John Frusciante - Curtains (2005)


Solamente a modo de aclaración/introducción, destaco que este post lo hicimos en conjunto con jesu, así que tendrán la dicha (?) de leer las palabras de ambas mentes aquí. Disfruten.
No hay mejor forma de describir este disco que utilizar cierto grado de abstracción, ciertos tintes sensacionalistas. Y es que Frusciante nos lleva a eso, a sensaciones puras, y casi mágicas, ¿por qué no? No hace falta describirlo como músico, ni describirlo en su estilo compositivo, ni encasillarlo siquiera en formas y lineas musicales, basta con solo apreciar, sentirlo, y dejarse llenar con todo lo que Curtains nos ofrece. Que no es poco, ciertamente.
La inmersión a la que pasamos una vez empezamos a escuchar este disco... es un estado más allá el que éste nos lo trae. 
En muchos instantes, Frusciante nos materializa la música en un plano en el cual nuestras miradas, ávidas de expectativas y ansias de magia, la  alcanza solo en apariencia (en que sus letras y mandatos sólo tienen en nosotros un efecto aparente), y es que nada es cerrado en ninguna frase, en ningún pasaje, nunca la completamos; y a medida que lo escuchamos, nos adentramos aún más y más en el paseo que nos propone Curtains.
El poder de la simpleza hecho música, resumiendo el disco en una guitarra y la voz (las voces) desgarradora de Frusciante. Pero simpleza solo en ese aspecto, porque lo enrevesadas y crípticas que son las letras... es curioso. Sí, las letras son como recién descriptas, pero es imposible que no nos lleguen hasta lo más profundo de nuestro ser. Nos identifican a todos. Y más aún, nos acercan, nos ayudan a todos. Sí, nos ayudan, Frusciante nos hace mejores personas cada vez que lo escuchamos, Frusciante nos saca eso que nos descoloca, que nos confunde, que nos hace no saber por qué estamos yendo hacia donde no deberíamos ir.
Es un disco para todo aquel que quiera ponerse en contacto con ese segundo mundo, aquel interior, propio. Atravesar la coraza y llegar a nuestro "yo" íntimo y vulnerable. Canciones para este fin, en Curtains, sobran. Y nos queda asegurado, durante algún tiempo, la sensación resonante en los oídos, de haber penetrado en una tierra lejana y extraña, y habernos dejado envolver por ella.

02 noviembre 2011

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Yndi Halda - Enjoy Eternal Bliss (2006)


Qué decir de este disco? Simplemente, destila magia. Es Post-Rock que va más allá del convencional. No es el típico uso de Guitarras+Cuerdas+Batería, no, es una amalgama perfecta. La atmósfera que crean te envuelve desde el primer segundo y de ahí es solamente un viaje de ida.
A destacar, el violín. El protagonismo que toma en las canciones, acompañado excelentemente del resto los instrumentos... es como si supieran exactamente qué tenían que hacer en cada momento.
No quiero (ni puedo) llenar más de palabras esto, sólo bájenlo.